REDACCIÓN INTERNACIONAL.- En el mundo digital actual, las redes sociales se han convertido en una herramienta indispensable para la comunicación, el entretenimiento y los negocios. Plataformas como Facebook e Instagram, propiedad de Meta, permiten a millones de usuarios conectarse y compartir contenido diariamente. Sin embargo, con el creciente uso y dependencia de estas plataformas, surge la preocupación de mantener nuestras cuentas seguras y evitar infracciones que puedan llevar a su desactivación. Perder el acceso a una cuenta que hemos construido con tanto esfuerzo puede tener consecuencias significativas, tanto a nivel personal como profesional.
Para profundizar en este tema, consultamos a Miguel Ángel Betancourt, experto en las redes sociales de Meta, quien nos ofrece valiosos consejos para prevenir la amarga experiencia de perder una cuenta. Sus recomendaciones se centran en comprender las normas comunitarias, ser conscientes del público al que nos dirigimos y saber cómo manejar situaciones en las que nuestras publicaciones puedan ser malinterpretadas.
- Comprender la naturaleza de la comunidad en Meta
Lo primero y más importante es entender que Meta permite la creación de cuentas a partir de los 13 años de edad. Esto significa que, a diferencia de otras redes sociales, en estas plataformas interactúan niños y adolescentes. “Debemos ser conscientes de que nuestro público incluye a menores de edad”, señala Betancourt. Por lo tanto, es fundamental ser cuidadosos con el lenguaje que utilizamos y el contenido que compartimos. Palabras o expresiones que pueden haberse normalizado en nuestro vocabulario cotidiano podrían ser consideradas inapropiadas o incluso ofensivas, violando así las normas comunitarias establecidas por Meta.
Es recomendable familiarizarse con las políticas de la plataforma, que detallan qué tipo de contenido y comportamiento están prohibidos. Esto incluye evitar lenguaje que pueda ser considerado como incitación al odio, acoso, discriminación o violencia. “Incluso comentarios que pretendan ser humorísticos pueden ser malinterpretados”, advierte Betancourt. Al comprender y respetar estas normas, protegemos nuestra cuenta y contribuimos a una comunidad más segura y respetuosa.
- Ser precavidos con el contenido visual
En nuestras publicaciones, fotos y videos, la forma en que nos presentamos y vestimos también es crucial. “El contenido visual tiene un gran impacto y puede ser interpretado de diversas maneras”, advierte Betancourt. Es importante evitar imágenes que puedan ser consideradas sugerentes o inapropiadas, especialmente dado el público joven que utiliza estas plataformas. Al compartir contenido, debemos asegurarnos de que cumple con las políticas de Meta y respeta los estándares de la comunidad.
Además, es importante considerar los contextos culturales y sociales de nuestra audiencia. Lo que puede ser aceptable en una cultura puede no serlo en otra. “Ser consciente de la diversidad de nuestra audiencia nos ayuda a evitar malentendidos y posibles infracciones”, agrega el experto.
- Reconocer las limitaciones de la inteligencia artificial
Si bien las redes sociales han avanzado enormemente en términos de tecnología y moderación de contenido, no son perfectas. Meta utiliza inteligencia artificial (IA) para detectar infracciones y contenido que viola sus normas. “La IA es una herramienta poderosa, pero no infalible”, explica Betancourt. En ocasiones, puede cometer errores y señalar contenido legítimo como infractor. Esto puede ser frustrante para los usuarios que se encuentran cumpliendo con las reglas pero ven su contenido eliminado o su cuenta restringida injustamente.
Es importante entender que los algoritmos pueden no captar el contexto o la intención detrás de una publicación. Por ejemplo, una imagen artística o una discusión sobre temas sensibles puede ser marcada erróneamente. “La IA carece de la capacidad de interpretación humana en ciertos casos”, enfatiza Betancourt.
- Manejar adecuadamente las apelaciones
Cuando una publicación es marcada por infracción, Meta ofrece la opción de apelar la decisión. Sin embargo, Betancourt aconseja cautela en este proceso. “Mi consejo es no proceder inmediatamente con la apelación”, sugiere. La razón es que la apelación inicial puede ser revisada nuevamente por otro sistema de inteligencia artificial, lo que podría ratificar la decisión original sin una evaluación humana adecuada. Esto podría empeorar la situación y hundir aún más la cuenta en términos de reputación y alcance.
En lugar de ello, es aconsejable recopilar evidencia que respalde que no se ha cometido ninguna infracción y esperar un tiempo antes de realizar la apelación. “A veces, permitir que pase un breve periodo puede aumentar las posibilidades de que la revisión sea realizada por un moderador humano”, señala.
- Buscar asistencia directa del soporte
En lugar de apelar automáticamente, Betancourt recomienda ponerse en contacto con el equipo de soporte de Meta si se considera que no se ha cometido ninguna infracción. “Al comunicarnos directamente con soporte, aumentamos las posibilidades de que un humano revise nuestro caso”, indica. Este enfoque personal puede llevar a una resolución más justa y precisa, ya que un moderador humano podrá evaluar el contexto y determinar si realmente se ha violado alguna norma.
Es importante ser claro y cortés al comunicarse con el soporte, proporcionando toda la información necesaria y explicando por qué se cree que ha habido un error. “La comunicación efectiva puede marcar la diferencia en la resolución de estos problemas”, aconseja Betancourt.
- Buenas prácticas para mantener la integridad de la cuenta
Además de los consejos anteriores, Betancourt sugiere adoptar buenas prácticas generales para proteger nuestras cuentas:
Mantener la seguridad de la cuenta: Utilizar contraseñas fuertes y activar la autenticación de dos factores para prevenir accesos no autorizados.
• Monitorear la actividad de la cuenta: Revisar regularmente las publicaciones y comentarios para asegurarse de que no haya contenido inapropiado, ya sea propio o de terceros en nuestras páginas.
• Educarse continuamente: Mantenerse actualizado sobre las políticas y cambios en las normas de la plataforma, ya que estas pueden modificarse con el tiempo.
Conclusión
La prevención es la mejor estrategia para evitar la desactivación de nuestras cuentas en las redes sociales de Meta. Al ser conscientes de las normas comunitarias y actuar de manera responsable en nuestras interacciones y publicaciones, reducimos significativamente el riesgo de infringir las políticas de la plataforma. Además, entender cómo funcionan los sistemas de detección de infracciones y saber cómo manejar las situaciones en las que nos vemos afectados injustamente, nos permite proteger nuestra presencia en línea y mantener la conexión con nuestra audiencia.
“Las redes sociales son una extensión de nuestra vida diaria y profesional”, concluye Betancourt. “Cuidar de nuestras cuentas es esencial para preservar nuestra reputación y continuar aprovechando las oportunidades que estas plataformas nos ofrecen. Al seguir estos consejos, podemos disfrutar de una experiencia en línea segura y enriquecedora”.