La situación en la región es muy compleja y ha escalado en los últimos tiempos. Hezbollah, el grupo libanés apoyado por Irán, ha intensificado sus ataques contra Israel en apoyo a Hamas, especialmente tras el estallido de la guerra en Gaza. Los intercambios de fuego han sido frecuentes, con cohetes lanzados desde el Líbano hacia Israel y respuestas aéreas por parte de las fuerzas israelíes.
Irán, por su parte, ha estado respaldando a Hezbollah y a otros grupos militantes en la región, lo que aumenta las tensiones. Israel ha advertido sobre la posibilidad de una mayor intervención iraní, lo que podría complicar aún más la situación. La comunidad internacional está preocupada por el riesgo de una guerra a gran escala en la región, y se están haciendo llamados a la desescalada y al diálogo.